domingo, mayo 29, 2005

Por dónde empezar

Parte I
Lo que hace a un laberinto son sus puertas, no sus paredes.

Parte II
Lo que hace a un laberinto son sus puertas, no sus paredes. ? O al revés?

Parte III
Para hacer un laberinto se requiere de puertas y paredes. Las ventanas son opcionales (e inútiles). También los hay con techo y sin techo, pero siempre tienen un piso impenetrable; no vaya a alguien ocurrirsele escapar cavando un hoyo.

Parte IV
Quién hace laberintos? respuesta con opciones múltiples:los locos, los sabios, los ociosos, los que no quieren ser encontrados, los que quieren ser buscados (no es anuncio de coca cola). Ninguno de los anteriores.

Parte V
Un laberinto no se hace, se recorre.

Parte VI
Método infalible para salir de un laberinto: pega la mano derecha a la pared y camina sin despegarla. No aplica para zurdos.

Parte VII
Existen los laberintos hechos de palabras. En un texto cualquiera se van formando caminos que corren de arriba a abajo y viceversa con el zigzagueo que permiten los espacios entre palabra y palabra. El uso abundante de conjunciones facilita mucho las cosas.

Parte VIII
Anoche soñé que todos los blogs del mundo conforman entre todos, un laberinto. Me desperté antes de que se me revelara si en esta orquesta, les toca ser las paredes o las puertas. No se olvide de presionar (siempre a la derecha) el botoncito que dice "next blog" y descubra a dónde lo llevará.